Nayib Bukele, presidente de El Salvador, sorprendió este domingo al realizarle una propuesta al líder de Venezuela. Se mostró dispuesto a realizar un intercambio de prisioneros con Nicolás Maduro, tras sugerir que entregaría a los venezolanos deportados por Donald Trump, desde Estados Unidos, que su gobierno mantiene encarcelados a cambio de los que denominó “presos políticos” que el país mantiene privados de su libertad.
En una publicación en la red social X, antes Twitter, Bukele enumeró a varios familiares de figuras de la oposición de alto nivel en Venezuela, periodistas y activistas detenidos durante la represión electoral del gobierno el año pasado.
En la publicación que Bukele realizó en sus redes sociales, le habló directamente a Maduro: “Usted ha dicho en numerosas ocasiones que quiere a los venezolanos de regreso y en libertad. A diferencia de usted, que tiene presos políticos, nosotros no tenemos presos políticos».
Tras esta tajante acusación, el jefe de Estado salvadoreño aseguró que “todos los venezolanos que están bajo custodia fueron detenidos en el marco de una operación contra pandillas como el Tren de Aragua en Estados Unidos». Más allá de las críticas y denuncias por exceso de poder y fuerza por parte de las organizaciones promigrantes, Bukele aseguró que muchos de los detenidos”han asesinado, otros han cometido violaciones, y algunos incluso habían sido arrestados en múltiples ocasiones antes de ser deportados», pero resaltó que “sus presos políticos no han cometido ningún delito. La única razón por la que están encarcelados es por haberse opuesto a usted y a sus fraudes electorales».
En este sentido, el presidente de El Salvador propuso “un acuerdo humanitario” que contemple la repatriación del 100 % de los 252 venezolanos que fueron deportados, a cambio de la liberación y entrega de un número idéntico (252) de los miles de presos políticos que usted mantiene.
Entre los que Bukele mencionó, figuran Rafael Tudares, yerno de Edmundo González; el periodista Roland Carreño; la abogada y activista Rocío San Miguel; la señora Corina Parisca de Machado, madre de María Corina Machado; cuatro dirigentes políticos asilados en la embajada de Argentina y otros venezolanos presos políticos. Asimismo, indicó que se incluirían los casi 50 ciudadanos detenidos de otras nacionalidades: estadounidense, alemana, dominicana, argentina, boliviana, israelí, chilena, colombiana, ecuatoriana, española, francesa, guyanesa, neerlandesa, iraní, italiana, libanesa, mexicana, peruana, puertorriqueña, ucraniana, uruguaya, portuguesa y checa.
Más allá de que este comunicado fue publicado por Bukele en sus redes sociales, el presidente de El Salvador confirmó que la Cancillería enviaría la correspondencia formal en las próximas horas.
Este llamativo mensaje se da en medio del intenso escrutinio internacional a El Salvador por haber aceptado recluir a venezolanos deportados por la administración de Donald Trump, a los cuales se los acusó de ser presuntos pandilleros, pero con escasas pruebas. Los deportados se encuentran detenidos en una megaprisión conocida como el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), construida por el gobierno de Bukele durante su ofensiva contra las pandillas del país.
La controversia no ha hecho más que continuar tras revelarse que un salvadoreño, Kilmar Abrego García, se encontraba entre los deportados, y han estallado batallas judiciales por su regreso. Las críticas continuaron el domingo, cuando el arzobispo de El Salvador, José Luis Escobar Alas, instó a Bukele a no permitir que el país centroamericano se convierta en una gran prisión internacional.
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