La puerta de su departamento estaba cerrada pero nadie respondía. Cuando finalmente ingresaron lo hallaron amordazado con una remera en la boca y en medio de una escena que parecía la de un robo. La víctima era Juan Pablo Jiménez, un reconocido economista de 61 años, que vivía solo en un séptimo piso de un edificio de la calle Castex al 3400, en el barrio porteño de Palermo.
Jiménez fue encontrado tras un llamado al 911 que hicieron su empleada doméstica y el encargado del edificio, preocupados por no obtener respuestas.
Al arribar al lugar, personal de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires y del SAME constató el fallecimiento. El cuerpo se encontraba amordazado con una remera, aunque sin signos visibles de violencia externa ni lesiones traumáticas. Según revelaron fuentes cercanas a la investigación a PERFIL, el lugar estaba revuelto, sin puertas forzadas, lo que refuerza la hipótesis de que la víctima conocía a sus agresores o los dejó ingresar voluntariamente.
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La Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Nº 55, a cargo del fiscal César Troncoso, encabeza la investigación. El equipo de la Unidad Criminalística Móvil y efectivos de la división Homicidios trabajaron en la escena. De acuerdo a los voceros, se ordenó la realización de una autopsia con análisis toxicológico, que será determinante para establecer la causa de muerte.
Sospechas. La principal hipótesis que maneja la Justicia es la de un posible ataque con características de “viudas negras”, una modalidad delictiva en la que mujeres seducen a hombres, generalmente mayores, para drogarlos y robarles. En muchos casos, el uso de sustancias químicas en dosis imprecisas puede provocar un desenlace fatal, como podría haber ocurrido con Jiménez.
“No había heridas compatibles con una causa directa de muerte y la obstrucción con la remera no afectaba las vías aéreas”, señalaron fuentes de la investigación. Los estudios complementarios de autopsia deberán establecer si fue víctima de un sedante o sustancia tóxica, lo que marcaría un antecedente más en una serie de delitos similares registrados en la Ciudad de Buenos Aires en los últimos años.
Si bien la modalidad de las “viudas negras” no es nueva, en los últimos años y con el creciente uso de las aplicaciones de citas, los casos se volvieron cada vez más habituales. Entre 2022 y 2024 hubo ataques en barrios de alto poder adquisitivo como Belgrano, Recoleta y Palermo. Según datos de la Policía de la Ciudad, en al menos cinco casos recientes se hallaron restos de benzodiacepinas en las víctimas. Este tipo de compuestos puede dejar pocos rastros si no se detectan en las primeras horas.
Dolor. La trágica muerte de Jiménez despertó una enorme conmoción en el ámbito académico y político. Economista formado en la Universidad de Buenos Aires (UBA), con estudios de posgrado en Columbia University (EE.UU.) y el Instituto Di Tella, la víctima fue un referente clave en la discusión sobre desarrollo fiscal y equidad en América Latina.
Tuvo un rol fundamental en la Cepal, donde fue director de la oficina regional en Uruguay y coordinador del área fiscal en Santiago de Chile. Desde ese espacio impulsó reformas tributarias progresivas, estudios sobre evasión fiscal estructural y propuestas de sostenibilidad económica frente al cambio climático.
Fue también presidente de la Asociación Iberoamericana de Financiación Local (Aifil), espacio desde el cual promovía una agenda de fortalecimiento de capacidades fiscales en gobiernos subnacionales. En ese marco, publicó investigaciones sobre federalismo fiscal y descentralización financiera.
En Flacso, donde dictaba la cátedra de Finanzas Públicas, lo recuerdan como un docente comprometido con sus alumnos y con la dimensión práctica del conocimiento. En sus clases, solía subrayar la importancia de conectar el diseño técnico de una política con los efectos sociales sobre los sectores más vulnerables.
Además de su papel como investigador asociado en Cippec, fue colaborador de múltiples medios especializados y coautor de libros claves sobre política tributaria, economía verde y desigualdad estructural. Participó en el proyecto Extractivism.de, de la Universidad de Kassel, donde analizaba el impacto de los modelos extractivistas en la sostenibilidad fiscal de América Latina.
La noticia de su muerte generó una ola de mensajes de despedida entre colegas, discípulos, amigos y referentes de la política económica regional. Todos coincidieron en destacar su visión de largo plazo, su capacidad de liderazgo en equipos interdisciplinarios y su calidez personal.
“Con profundo dolor despedimos a Juan Pablo Jiménez, investigador asociado de Cippec y destacado economista. Referente académico en desarrollo, política fiscal, economía pública y finanzas, su aporte riguroso y su pasión por la equidad y el progreso dejarán una huella imborrable”, expresó Cippec a través de la red X.
Desde Aifil, la organización que presidió, señalaron: “Con inmensa tristeza comunicamos el fallecimiento de Juan Pablo Jiménez, referente fundamental de nuestra organización y motor incansable de cada proyecto. Acompañamos a sus afectos en este dolor. Siempre presente”.
Las últimas horas
L.N.
La investigación por la muerte del reconocido economista recién arranca. En las primeras horas, los pesquisas se dedicaron a analizar las cámaras de seguridad de la zona, entrevistar a su entorno y tratar de reconstruir cómo fueron sus últimas horas.
Los pesquisas destacaron que no hallaron puertas forzadas y que la principal pista que siguen es que el autor (o la autora) ingresó con el consentimiento de Jiménez al edificio y se fue llevándose las llaves del lugar. La escena que encontraron los investigadores es la de un robo, con muchas prendas y cajones tirados. Resta saber si efectivamente los autores consiguieron escapar con objetos de valor o dinero y si el economista y docente falleció durante el robo o se descompensó después de haber sido dormido con alguna sustancia, como creen los investigadores.
Lo cierto es que para avanzar en la identificación de los autores es clave el análisis de las cámaras. Lo que buscan es establecer quiénes y cuántas personas ingresaron al edificio y qué recorrido hicieron tanto para llegar como para retirarse.
Los testigos del edificio no dieron indicios de una pelea o discusión a la hora en la que supuestamente ocurrió el hecho, lo que alimenta la pista de que la víctima pudo haber tomado una bebida con alguna sustancia que luego le provocó la muerte.